Imágenes del tema: kelvinjay. Con la tecnología de Blogger.

Nacional

Estados

Politica

Violencia

Migrantes haitianos sin documentos serán deportados desde finales de septiembre

A partir del 30 de septiembre, los migrantes haitianos varados en Baja California que no hayan conseguido los documentos necesarios para su estancia en México serán deportados por el Instituto Nacional de Migración (INM), denunció Wilner Metelus, activista de los derechos migratorios y presidente del Comité Ciudadano de Defensa de los Naturalizados y Afromexicanos.

De acuerdo con Metelus en entrevista con Apro, sólo mil 200 de los siete mil migrantes haitianos en Baja California cuentan con una visa humanitaria, mientras que el resto no puede tramitarla por no tener pasaporte.

México, en aprietos por la ola de migrantes haitianos y africanos

Una ola sin precedente de haitianos y africanos, además del amplio flujo habitual de centroamericanos y migrantes de otras nacionalidades, pone a México en aprietos.

Nuestro país, advierten especialistas, debe atender con mejores prácticas y más recursos a los extranjeros irregulares, pero también buscar alternativas de trabajo, salud y educación para miles de paisanos deportados de Estados Unidos.

Esta situación podría recrudecerse con la llegada de Donald Trump a la presidencia del país vecino a partir del 20 de enero, señalaron.

En 2015 México parecía recuperar aliento en el tema, luego de un boom de migrantes menores de edad en 2014 que buscaban reunirse con sus familiares en Estados Unidos.

En el caso de asiáticos, africanos y caribeños, la estadística de la Secretaría de Gobernación mostraba cierta normalidad.

En 2015 fueron presentados ante la autoridad migratoria mexicana 2 mil 224 asiáticos (principalmente de India y Bangladesh).

Respecto de los africanos, fueron 2 mil 78 en esa situación (básicamente procedentes de Ghana y Somalia); en cuanto a los caribeños, la alerta era por el alto flujo de cubanos: 9 mil 623, mientras los haitianos figuraban apenas como minoría regional, con 77 registros en todo el año.

Las cifras anteriores, sin embargo, no eran representativas de algún fenómeno en especial, porque el foco era Centroamérica, con 179 mil 618 eventos, de los cuales 176 mil 726 fueron repatriados, es decir, casi 98 por ciento.

En cambio, en 2016 el número de migrantes procedentes de Asia se duplicó durante los primeros 11 meses del año (4 mil 374).

La cifra de africanos pasó de 2 mil 78 a 16 mil 268, número nunca registrado, y se espera que esos datos sigan en ascenso.

En el caso de los haitianos, las cifras oficiales sólo reportan 2 mil 380. Sin embargo, datos de Gobernación indican un flujo, durante el último trimestre de 2016, de más de 4 mil 500 varados en la frontera norte mexicana, en espera de ser recibidos, a cuentagotas, del lado estadunidense para solicitar refugio, el cual les ha sido negado desde el 22 de septiembre (el gobierno de Barack Obama dio por terminada la amnistía para los haitianos).

Especialistas y funcionarios consultados dijeron que la ruta de ese flujo migratorio se inicia en América del Sur, especialmente en Brasil, adonde llegaron a trabajar ciudadanos de esas nacionalidades para la preparación de los Juegos Olímpicos de Río, pero al terminar el empleo emigraron con el objetivo de llegar a Estados Unidos vía México.

Sin embargo, al concluir la amnistía para haitianos, cerrarse las vías para los africanos y tener en el foco prioritario de la deportación a mexicanos y centroamericanos, el problema se traslada a México.

Alejandra Castañeda, doctora en antropología y coordinadora del Observatorio de Legislación y Política Migratoria de El Colegio de la Frontera Norte, habló al respecto.

Se trata, dijo, de un flujo al que México no está acostumbrado, no sólo por el volumen, sino por el lenguaje, lo cual dificulta en principio la comunicación.

Esta ola de migrantes de otras latitudes –que comenzó en marzo del año pasado y tuvo picos críticos en el verano– ha sido atajada principalmente por organizaciones de la sociedad civil, no por el gobierno.

Nuestro país, añadió Castañeda, ha tenido una coordinación aceptable con su contraparte por su actitud de servicio al gobierno de Barack Obama en un papel de policía de Estados Unidos para contener la migración procedente de Centroamérica, principalmente.

Sin embargo, ahora, a partir de este mes, habrá un gobierno más hostil hacia México y la pregunta es: ¿qué hará nuestro gobierno, en especial para atender a sus paisanos deportados? –185 mil 437 tan sólo de enero a octubre de este año–, en especial a niños y adolescentes que no hablan bien español.

Igualmente, se prevé un aumento de deportaciones de centroamericanos, pese a que proceden de una zona violenta en extremo.

En 2014, según una reciente estimación de Gobernación, hubo 342 mil 384 migrantes centroamericanos en tránsito irregular por México.

Un año después se informó de una devolución de 176 mil centroamericanos de México a sus lugares de origen, así como de 42 mil deportados de Estados Unidos.

Los flujos de los originarios de Guatemala, Honduras y El Salvador que utilizaron México como país de tránsito y fueron devueltos a sus naciones de origen por las autoridades migratorias mexicanas han mantenido un crecimiento constante desde 2012, señaló la Unidad de Política Migratoria de Gobernación.

Al respecto, Castañeda y María Dolores París, también investigadora de El Colegio de la Frontera Norte, comentaron en un reciente informe tras el triunfo de Trump: Considerando esta nueva ola de políticas adversas a los migrantes en Estados Unidos y un probable aumento de la inversión en control y seguridad en la frontera con México, nuestro país podría verse afectado por un crecimiento de las deportaciones de ciudadanos mexicanos y un aumento de solicitantes de asilo y migrantes varados en las ciudades fronterizas.

Al igual que las especialistas mencionados, Elba Coria Márquez advirtió sobre la importancia de fortalecer a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (instancia de Gobernación con escaso presupuesto –25 millones de pesos para 2017– y apenas tres oficinas en todo el país). En especial, para procesar solicitudes de refugio, así como el diseño de políticas públicas distintas que no se limiten a detener a los migrantes, en particular a los centroamericanos, en estaciones.

México es ya un cuello de botella. Es necesario aumentar el personal (de la Comar) para agilizar procedimientos con pleno respeto a los derechos humanos de los extranjeros.





Fuente: La Jornada
Autora: Fabiola Martínez
http://www.jornada.unam.mx/2017/01/02/politica/011n1pol

Llama CIDH a prevenir discursos de odio contra migrantes

Ciudad de México. Con motivo del Día Internacional del Migrante, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hizo un llamado a los Estados de la región a adoptar medidas para prevenir todo tipo de discursos y apologías al odio tendientes a incitar a la violencia o cualquier otro tipo de acciones ilegales contra personas migrantes, refugiados y apátridas.

En un comunicado, indicó que en la actualidad hay más de 63 millones de migrantes internacionales en los países de América.

Durante los últimos años, se menciona en el texto, la Comisión "ha observado con suma preocupación el auge de discursos dirigidos a fomentar el odio, la violencia y la discriminación contra las personas migrantes y apátridas en diversos países de la región y del mundo".

El auge de estos discursos, en los últimos meses, "ha venido acompañado por un aumento en las cifras de crímenes de odio y diversas formas de acoso contra estas personas", señaló.

Además, dijo que"cada vez con mayor frecuencia, los migrantes están siendo acusados por partidos nacionalistas y políticos populistas del aumento de la criminalidad, el terrorismo y el desempleo, sin suministrar datos estadísticos que prueben este tipo de afirmaciones. A partir de la manipulación de la percepción pública sobre la migración, ciertos políticos han convertido a migrantes y refugiados en los principales chivos expiatorios que utilizan para alimentar el miedo en sus sociedades y ganar apoyo popular".

La CIDH "ha observado con preocupación cómo los discursos políticos de odio hacía los migrantes han venido acompañados con propuestas relativas al cierre de fronteras, la construcción de muros migratorios, la detención y deportación masiva de migrantes y en general hacía la estigmatización y criminalización de los migrantes, en particular de aquellos que se encuentran en situación migratoria irregular. En muchos casos, este tipo de medidas han pasado de los discursos a la práctica, ocasionando violaciones graves y masivas violaciones a los derechos humanos de los migrantes y sus familias".

Por tal motivo, la Comisión Interamericana "recuerda que es obligación de los Estados adoptar medidas para prevenir que estas condiciones de odio y discriminación se difundan, empeoren o traduzcan en actos concretos de violencia, así como de proteger a los grupos y sectores principalmente afectados, como son las personas migrantes.

"Asimismo, la tolerancia o inacción de los Estados ante discursos de odio, discriminatorios o de las manifestaciones violentas contra personas migrantes u otras minorías refuerzan la creación de contextos discriminatorios, haciéndolas más vulnerables; de manera que los Estados deben de establecer sanciones de diversa índole de manera que respondan de manera adecuada los despliegues de discriminación, odio y violencia por parte de actores estatales o particulares".





Fuente: La Jornada
Autor: Redacción
http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2016/12/18/llama-cidh-a-prevenir-discursos-de-odio-contra-migrantes

Migrantes, los muertos en vida

“La respuesta de las autoridades no corresponden a la urgencia que significa la migración de personas de diversas nacionalidades que buscan llegar a Estados Unidos y que antes pasan por México. Afrodescendientes, haitianos, ucranianos pero también centroamericanos y mexicanos viven una situación precaria y de incertidumbre en las fronteras de nuestro país. Las respuestas que reciben son asistencialistas y no la ayuda humanitaria que en realidad se necesita”, afirma a DesinformémonosLeticia Gutiérrez, directora de la organización SMR Scalabrinianas Misión con Migrantes y Refugiados.

Desde abril de este año afrodescendientes y haitianos comenzaron a llegar de manera masiva a México. Muchos de ellos son quienes después del terremoto en Haití en 2010 migraron a lugares como Brasil, “país que los recibió de manera solidaria en el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva. Los dejó ingresar para que formaran parte del grupo productivo de trabajadores de Brasil, pero en enero de este año luego de la situación política contra Dilma Rousseffy y el desastre económico que hoy vive ese país derivó en que los haitianos busquen otros espacios”, dijo la defensora de las personas migrantes.

Según información recabada por la activista algunos llegaron en avión de Brasil pero quienes no cuentan con los recursos para pagar ese viaje han llegado en autobús. “Platiqué con un matrimonio que se vino en autobús desde allá, ella venía embarazada y dio a luz en Chihuahua. Otros migrantes viajan hasta tres meses para poder llegar a México y después a Estados Unidos”.

Leticia Gutiérrez, afirma que la respuesta de las autoridades que no va acorde con la necesidad. “Los diplomáticos de Haití, de África o de los diferentes países no han solicitado que se reciba a sus connacionales por razones de ayuda humanitaria, han sido omisos. Por su parte Miguel Agel Osorio Chong, Secretario de Gobernación de nuestro país, acudió a Tijuana pero a dar una respuesta asistencialista, sin embargo lo que se espera no son víveres. Se trata de una exigibilidad de una política migratoria de acogida integral y no sólo asistencial, eso incluso lo han podido solventar las casas para migrantes y las personas de buena voluntad con cuyo apoyo se han atendido a alrededor de 15 mil personas”, asegura Leticia Gutiérrez.

En el caso del gobierno de Estados Unidos, “si bien Obama hizo público que otorgaría a los migrantes afrodescendientes y haitianos visas humanitarias, hemos registrado la disminución en el número de dichas visas. Iniciaron dando 100 visas al día y han disminuido a 30 visas contando incluso las que dan por día en Tijuana y Mexicali. Mientras esperan sufren las inclemencias del tiempo, hacinamiento, están varados, durmiendo en colchonetas, casas de campaña o tirados en el suelo. Existe una presencia que se incrementa de migrantes Haitianos y Africanos pero también las y los mexicanos y centroamericanos están en las fronteras sin que las autoridades resuelvan los problemas de raíz que tienen que ver con la pobreza, el desempleo y la inseguridad que se vive también en nuestros países”, afirmó Leticia Gutiérrez.





Fuente: Desinformémonos
Autora: Atziri Ávila
https://desinformemonos.org/migrantes-los-muertos-vida/

Un albergue llamado Tijuana

La garita El Chaparral San Ysidro, el cruce fronterizo más transitado del mundo, se convirtió en un embudo cuando miles de migrantes haitianos y africanos entrevieron la posibilidad de ser acogidos legalmente en Estados Unidos. Con ese objeto cruzaron México desde Tapachula hasta Tijuana, pero ahí el control estadunidense ha sido lento. Las consecuencias las sufren primero los propios migrantes, que llegan con escasos recursos o sin ellos, pero también el gobierno municipal y la sociedad civil, que realizan labores humanitarias sin la ayuda adicional que se requiere del gobierno federal.

TIJUANA, BC. (Proceso).- Cientos de colchonetas y tapetes cubren el piso de la iglesia evangelista Embajadores de Jesús, en Tijuana. Es un galerón de tabique pelón erigido en las terrosas faldas del Cañón del Alacrán, sólo unos metros hacia abajo de un basurero clandestino.

Los 183 ocupantes temporales de la iglesia provienen de Haití. No todos tienen dónde dormir: el lugar de culto, en el que se solía distribuir desayunos a la comunidad vecina, no fue concebido como albergue.

“Nunca me imaginé la dimensión que tomaría esta situación”, dice Zaida Guillén, quien maneja la iglesia con su esposo, el pastor Gustavo Banda. Para ella, que es maestra de preparatoria, la “aventura” empezó a principios de septiembre, cuando invitó a su casa a dos familias haitianas que se disponían a pasar la noche en una banqueta del centro de la ciudad.

El gobierno municipal, rebasado por la cantidad de migrantes haitianos que llegaron a Tijuana desde mayo pasado, le pidió a Guillén que alojara más personas en la iglesia. “Empezamos con 40, después 100 y llegamos a 240”, relata ella. Las autoridades consiguieron colchonetas y alimentos, además de prometer un pronto apoyo financiero.

La mayoría de la ayuda en especie que reciben Guillén y Banda proviene de los feligreses y de la sociedad civil. La profesora solicitó a su escuela un permiso sin goce de sueldo para dedicar este semestre a los migrantes, pero no lo obtuvo.

En los primeros meses los migrantes se hospedaron en cuatro albergues, pero siguieron llegando y tuvieron que improvisarse siete refugios. En septiembre la situación se agudizó; los haitianos ya no cupieron.





Fuente: Proceso
Autor: Mathieu Tourliere
http://www.proceso.com.mx/459767/albergue-llamado-tijuana