FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ARTURO RODRÍGUEZ GARCÍA.
MÉXICO, D.F. (apro).- El acuerdo de las cúpulas partidistas llamado Pacto por México, que modificó la estructura constitucional del país, ha muerto. El presidente Enrique Peña Nieto lo sepultó esta noche, en cadena nacional… Y hasta leyó su epitafio:
“Con la aprobación de la reforma energética, culmina el trabajo legislativo del importante ciclo que iniciamos el segundo día de esta administración”, rememoró el presidente.
Las exequias se celebraron en un set con mural de fondo, posiblemente en Palacio Nacional, con acercamientos y alejamientos de la cámara del rostro del presidente durante el peculiar réquiem, quien esta vez, a diferencia de los veinte meses previos, no apeló a su supervivencia, sino que declaró su deceso.
En apenas 20 meses de vida –una tercera parte mutilado del PRD, una de sus manos aprobadoras–, el Pacto por México ha dejado un legado de cambios constitucionales en materia educativa, fiscal, de contabilidad gubernamental, financiera, política, de telecomunicaciones y energética.