"Un grupo de servidores decidió sacar dinero de la hacienda pública para hacer el pago de una deuda que ya no existía", resumió.
La aparición y desaparición de mil 600 millones de pesos en las cuentas del Saascaem (Sistema de Autopistas, Servicios Conexos y Auxiliares del Estado de México) “no ha sido aclarado y es obligación de la Secretaría de Hacienda iniciar la investigación correspondiente y denunciar penalmente”, aseveró el abogado Paulo Díez, quien sospecha que los recursos podrían ser usados para la campaña en el Estado de México.
En una carta enviada al secretario José Antonio Meade, Díez aseveró que “suponiendo que los $1,600 millones de pesos hubieran sido pagados por el gobierno federal, al amparo del referido convenio de transacción, se trataría de dinero “sucio”, cuyo origen y destino se habría tratado de ocultar (deliberadamente) a través del Saascaem, utilizando al menos una institución del sistema financiero mexicano”.