La Barranca de Tarango, la única que queda sin urbanizar al poniente de la Ciudad de México, está bajo el acecho de las desarrolladoras inmobiliarias luego de que en junio el Gobierno de la Ciudad de México determinó que la zona sea un Sistema de Actuación por Cooperación (SAC) a pesar de que en 2009 fue decretada como un Área de Valor Ambiental (AVA), advirtió Martha Delgado Peralta, integrante de la Fundación Pensar y la ex Secretaria de Medio Ambiente de la capital (2006-2012).
Esta barranca de 270 hectáreas se ubica en la Delegación Álvaro Obregón, al sur de la ciudad, y tiene una importancia estratégica para la recarga del acuífero capitalino, además de recibir la migración de flora y fauna expulsada por el boom inmobiliario.