Para Nicanor Garrida, reportero gráfico de El Heraldo de León en su corresponsalia en el municipio de San Francisco del Rincón, Guanajuato, detrás del ataque con bombas molotov a su camioneta y a su casa, pudiera haber posibles represalias por su labor periodística.
El periodista señaló que en sus 25 años de experiencia, nunca recibió ninguna amenaza, hasta hace menos de un mes que cubrió dos hechos sangrientos donde familiares de los afectados le reclamaron por tomar fotografías, por lo que considera que el acto que sufrió junto con su familia pudieran ser posibles actos de represalia por su labor periodística.