Andrés Neri Ventura, delegado de la cabecera municipal de Tlacoapa, en la región guerrerense de La Montaña, señala un montón de láminas acanaladas tirado en el suelo, junto a una obra que iba a ser un plantel preescolar pero que fue abandonada hace cuatro años.
El hombre recuerda con amargura las promesas que hizo Rosario Robles Berlanga en el auditorio del pueblo en abril de 2014. La entonces secretaria de Desarrollo Social sostuvo que el plantel estaría terminado para que los niños iniciaran “el próximo ciclo en aulas nuevas”.