En ese lapso, el suicidio creció 15 por ciento, y el aumento ha sido exponencial en entidades como Chihuahua, que en 2016 encabezó la lista de los estados con la mayor tasa de suicidios por cada 100 mil habitantes, con 11.7 casos, lo que significa casi el doble de la media nacional. La falta de implementación de políticas públicas de prevención y la concientización de la sociedad respecto a está situación son factores que también se asocian a esté problema. Los médicos coinciden que una programa nacional de prevención del suicidio contribuiría a bajar los índices de este problema de salud pública.
El suicidio en México es ya un problema de salud pública que se desprende de diversas afectaciones por inestabilidad mental, por las situaciones económica y social, e incluso por los altos niveles de violencia que se registran en todo el país.