El exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya Austín buscó frenar a través de una demanda de amparo la elaboración de versiones públicas de las averiguaciones previas iniciadas por el caso Odebrecht. Es decir, que se clasificara como reservado todo el caso, y no solo sus datos personales y los de su familia como se conocía hasta ahora.
Pero un Tribunal Federal encargado de revisar el caso resolvió en definitiva y por unanimidad negarle a Lozoya dicha solicitud, al considerar que el caso Odebrecht es un asunto de corrupción a gran escala, y que por encima de sus intereses particulares debe privar el interés público y general. Por ende, la PGR (hoy Fiscalía General de la Repúbloca) tiene que elaborar versiones públicas del caso.