La Comisión Nacional del Agua (Conagua) detectó 2,280 tomas clandestinas de agua en México entre 2012 y 2018. Se trata de pozos abiertos por usuarios individuales o empresas que extraen el líquido sin contar con permisos correspondientes, contribuyendo a la sobreexplotación de los acuíferos. Este es uno de los datos que se extraen del informe “Corrupción en el sector del agua: ¿quién es responsable de la crisis?”, publicado por Laboratorio Ethos, think tank o centro de análisis dedicado a las políticas públicas.
El informe, elaborado por los investigadores Rodrigo Bolaños, Dalia Toledo y Cuauhtémoc Osorno, se centra en cómo la corrupción ahonda en los problemas de escasez y contaminación del agua que sufre México.