Calculador y evasivo al extremo, Tomás Zerón de Lucio decidió entregarle a Alejandro Encinas unas cuantas piezas de información para que tuviera algo con qué responder a la urgencia del presidente Andrés Manuel López Obrador de mostrar avances en el esclarecimiento de la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa.
Encinas había viajado un poco antes a Israel, a mediados de febrero de 2022, para convencer a Zerón de Lucio de que colaborara con la investigación y, a cambio, le había ofrecido inmunidad.