Con el nombramiento de Emilio Chuayffet al frente de la Secretaría de Educación Pública (SEP), la lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo, perdió posiciones clave dentro de la dependencia federal.
Y es que en el puesto que ocupaba su yerno Fernando González como titular de la Subsecretaría de Educación Básica ahora fue nombrada la especialista Alba Martínez Olivé, con lo que la maestra quedó fuera del reparto de cargos en la SEP, indica Reforma.
De acuerdo con el diario, con estos nombramientos se debilita la influencia de Gordillo dentro del nuevo gobierno federal ya que el martes pasado fue nombrado Sebastián Lerdo de Tejada como director del ISSSTE. En las administraciones de los expresidentes Fox y Calderón, ese cargo fue ocupado por funcionarios leales a la lideresa magisterial.
