AUTOR: JUAN PABLO PROAL
Uno de los discursos más gastados apunta al lugar común: “invirtamos en nuestro futuro, los jóvenes”. Si hacemos un corte de caja hasta este momento, podemos decir que el saldo final advierte que México apostó a perder. Las nuevas generaciones fueron alimentadas con veneno, bombardeadas con frustrados sueños artificiales y explotadas por la cruel cultura de la ganancia sin escrúpulos.
La investigadora Emilia Lucio, de la Facultad de Sociología de la Universidad Nacional Autónoma de México, dio la bienvenida a 2013 con una cifra que paraliza: el suicidio juvenil es una de las tres causas de muerte en menores de edad, precedida por los accidentes automovilísticos y el cáncer.