La Cruzada Nacional contra el Hambre anunciada por el Ejecutivo Federal es un programa con una estrategia pobre en el diseño de políticas sociales, que tienen como propósito un carácter político electoral, advirtieron los diputados perredistas Eduardo Santillán Pérez y Dinorah Pizano Osorio ayer en conferencia de prensa.
Santillán Pérez señaló que en el Distrito Federal, solo se aplicará en cuatro de las 16 delegaciones, y particularmente es en donde se concentra el 48 por ciento del padrón electoral de la ciudad de México, “estamos hablando que en la delegación Iztapalapa, Gustavo A Madero, Álvaro Obregón y Tlalpan en donde hay tres millones 700 mil electores en estas cuatro delegaciones”.
El diputado subrayó que “se corre el riesgo de la institucionalización del caso Monex y que lo que tengamos ahora sería un Monex convertido en gobierno, Monex convertido en política publica, y es grave que se vuelvan a establecer mecanismos similares para llevar a cabo este programa”.