AUTOR: PAULINA VILLEGAS.
La extinta SSPF y su extitular recibieron duras críticas durante la presentación del informe de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
No es un secreto que, en materia de derechos humanos, la situación en México es grave. Y tampoco el hecho de unos son más culpables que otros.
La extinta Secretaría de Seguridad Pública Federal, encabezada por el exsecretario Genaro García Luna, fue una de las dependencias que más violaciones de derechos humanos registró el año pasado.
Y por si fuera poco, además se negó a aceptar ni una sola recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Esta fue una de las acusaciones más duras y concretas lanzadas ayer por el titular de la CNDH, Raúl Plascencia Villanueva, durante la presentación del informe anual de la organización, máximo órgano de vigilancia de los derechos humanos, en un acto al que asistió el presidente Enrique Peña Nieto.