Es "una esclavitud encubierta y, como tal, resulta inadmisible", señalan organismos civiles mundiales.
Nueva York. Un grupo de 10 organismos civiles llamó hoy a los gobiernos del mundo a ratificar el convenio internacional para mejorar las condiciones de vida y brindar protección a los 15 millones de niños empleados en labores domésticas.
"El trabajo infantil en el servicio doméstico no es otra cosa que esclavitud encubierta y, como tal, resulta inadmisible", señaló la entidad Global March Against Child Labour.
"Es responsabilidad de los gobiernos restablecer la libertad, dignidad y la niñez para estar a la altura de los compromisos asumidos", indicó.
El convenio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), adoptado en junio de 2011, podría lograr profundos cambios para los niños empleados en labores domésticas, que representan casi el 30 por ciento de los entre 50 y 100 millones de esta fuerza laboral en el mundo.