AUTOR: SANJUANA MARTÍNEZ.
LINK: http://www.sinembargo.mx/opinion/01-04-2013/13518
Blanca abrió su consultorio dental hace una semana. Está nerviosa. Ayer decidió retirar el anuncio de la fachada luego de recibir una llamada: “Somos Zetas. Si quieres tener tu consultorio en paz, tendrás que dar la cuota”, le dijo un hombre que se identificó como “jefe de zona”.
A su amiga Mónica le pasó lo mismo en su salón de belleza. A ella la extorsionan desde hace dos meses. El sujeto supuestamente “Zeta”, llega puntualmente cada semana. Lleva una lista escrita en una libreta donde palomea a quienes se portan bien y pagan “derecho de piso”; a los que no, les corresponde el frío plomo. El binomio “plata o plomo” sigue funcionando. Para los renuentes, tarde o temprano habrá una balacera que acabe con sus clientes; o bien, el secuestro intempestivo del dueño del negocio y la consecuente desaparición. Cada semana las matanzas indiscriminadas en negocios del llamado giro negro ya ni siquiera son noticias consideradas importantes.