AUTOR: JESÚS CANTÚ.
MÉXICO, D.F: Antes de cumplir la mitad de su ejercicio, el gobernador Javier Duarte muestra un saldo de nueve periodistas asesinados, tres desaparecidos y un buen número de exiliados o forzados al retiro por las amenazas recibidas; sin embargo, ante la denuncia de que existe información sobre la presunta intención de atentar contra la integridad física de Jorge Carrasco, reportero de Proceso, la respuesta gubernamental es rechazarla y solicitar la interposición de una denuncia formal, sin jamás asumir su elemental responsabilidad como autoridad.
Tras el asesinato de Regina Martínez, corresponsal de este semanario en Veracruz, el 28 de abril del año pasado, se nombró a Carrasco como responsable de dar seguimiento al caso y coadyuvar con las investigaciones ministeriales. La semana pasada (Proceso 1902) la revista publicó un trabajo periodístico del reportero que desnuda las limitaciones, manipulaciones y contradicciones de la investigación de la Procuraduría y la sentencia de la juez.