AUTOR: EMIR OLIVARES ALONSO.
El grupo de jóvenes que desde el 19 de abril mantiene la ocupación de la torre de rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró que llegaron hasta ese extremo porque las autoridades de la casa de estudios ‘‘no escucharon nuestras demandas a través de los canales institucionales’’.
Los inconformes señalaron que en la toma del edificio ‘‘no hubo violencia, pues no se agredió a ninguna persona y sólo se rompió un vidrio’’.
En una entrevista videograbada con el Colectivo Malatesta –que fue compartida con La Jornada y ya circula en redes sociales–, insistieron en sus demandas y en la necesidad de resolver el conflicto por medio de un diálogo ‘‘público y resolutivo’’ con el rector José Narro Robles.