AUTOR: ALINA ROSAS DUARTE.
Xochimilco, el cementerio de flores reconocido a nivel mundial y denominado Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1987, hoy se ve afectado por la falta de compromiso de sus gobernantes con el bienestar de sus pobladores -la mayoría, pueblos originarios que se rigen bajo usos y costumbres-.
Grupos de ciudadanos en Xochimilco se han organizado en comités, frentes, organizaciones, y demás, para evidenciar las acciones del Gobierno local que lejos de beneficiar a los xochimilcas, los afectan de sobremanera. Tal es el caso de la construcción de un Mega Chedraui en un poblado que se basa fundamentalmente en el pequeño comercio: Santiago Tepalcatlalpan.
“Santiaguito”, como le llaman sus habitantes, es uno de los pueblos originarios de Xochimilco, en el cual -bajo un discurso de modernización- se pretende construir un Mega Chedraui que abarca más de 16,000 m2 y cuya presencia afectaría al poblado que vive de la venta de hortalizas, abarrotes, y demás negocios que, con un Chedraui, no tendrían cabida.