La propuesta energética contempla una reforma constitucional y para la que se requieren 86 votos que el PRI no conseguiría sin el PAN.
El PRD se levantó de la mesa de la reforma político electoral que era la antesala para la tan esperada reforma energética.
El escenario se pone turbio pues se sabe que una parte del PAN ya negocia con la Presidencia de la República sobre ese tema y en la mesa no hay ningún otro actor político.
Es la fracción afín al dirigente nacional panista, Gustavo Madero, la que a espaldas del Congreso ya busca consensos y acuerdos en el tema energético.