MÉXICO, D.F., (apro).- En un territorio convulsionado por la narcoviolencia, el gobierno de Fausto Vallejo no termina de acomodarse.
Entre licencias, ausencias obligadas y remociones, el mandatario sigue sin tomar las riendas del gobierno a tal punto que tuvo que apechugar y permitir el regreso del número dos en la administración pública estatal, Jesús Reyna.
A pesar de que Reyna declaró públicamente que no regresaría al gobierno de Michoacán, la mañana de este lunes Vallejo anunció su retorno a la secretaría general de Gobierno.
Reyna sustituyó a Vallejo por espacio de seis meses, luego de que este último se ausentó para someterse a un trasplante de hígado en Estados Unidos.
Luego del regreso de Vallejo, Reyna se alejó y, en declaraciones a Radio Fórmula, aseguró que se iba para no volver. “No me siento con ánimo ‘para regresar’”, confesó.