Luego de rechazar en una primera instancia su fusión, la Comisión Federal de Competencia Económica autorizó la venta de Cinemark a su competidor Cinemex, pese a que en principio negó esta por considerar que se crearía un duopolio.
La mayoría de los comisionados consideró que no existen elementos para concluir riesgos sustanciales a la competencia en el mercado de exhibición de películas en sala, derivados de una eventual fusión de ambas empresas.
El análisis señala que Cinemark, en comparación con sus principales competidores,mantiene baja participación de mercado y presencia limitada, por lo que es un agente económico que no ha ayudado a intensificar la competencia de su sector.