Los diputados federales que deciden el presupuesto de egresos de la federación, piden a los presidentes municipales beneficiados con recursos de éste un porcentaje de las obras a realizar. O incluso los extorsionan a cambio de que los munícipes asignen las obras a constructoras cercanas a los diputados federales.
El diario Reforma releva que los dirigentes de asociaciones municipales, presidentes municipales y ex expresidentes, así como algunos de los propios diputados federales, reconocieron que piden por lo menos el 10% de la obra.