La recopilación de datos está basada en la Patriot Act, que es la ley creada tras los ataques del 11 de septiembre, y supervisada por el Tribunal de Vigilancia de la Inteligencia Extranjera (FISC).
Estos movimientos se realizan al amparo de la polémica Agencia de Seguridad Nacional (NSA), y se hacen principalmente a compañías como Western Union.
Los funcionarios pidieron que se guardara el anonimato para protegerse.
Revelaron que dicha recopilación de datos está basada en la Patriot Act, que es la ley creada tras los ataques del 11 de septiembre, y supervisada por el Tribunal de Vigilancia de la Inteligencia Extranjera (FISC).
La información recopilada no incluye transferencias domésticas o transacciones entre bancos, según las fuentes.