MÉXICO, D.F., (apro).- Los grupos de autodefensa que operan actualmente en el estado de Michoacán se comprometieron a dejar las armas hasta que las autoridades federales les entreguen las cabezas de los siete líderes de Los Caballeros Templarios, con las respectivas pruebas de ADN, advirtió José Manuel Mireles Valverde, coordinador general del Consejo Ciudadano de Autodefensa en esa entidad.
Las pruebas de ADN las requieren, precisó, porque “luego resucitan” los criminales, como ya sucedió en los casos de Nacho Plancarte y Nazario MorenoEl Chayo.
Ambos, dijo en entrevista con Noticias MVS primera emisión, fueron supuestamente abatidos en la anterior administración, en el marco del combate al crimen organizado, y ahora operan con otros nombres.
A El Chayo, por ejemplo, supuestamente lo mataron los federales, hicieron nueve marchas fúnebres y velorio y “resucitó” con el nombre de Ernesto Moreno Villa, una combinación de Ernesto Che Guevara, José María Morelos y Francisco Villa, acusó el líder comunitario.
De Plancarte, abundó, hay incluso un video que circula en Youtube en el que se presenta como “representante de la hermandad de Los Caballeros Templarios y reta a muerte a Hipólito Mora, líder comunitario de La Ruana.