AUTOR: ROSALÍA VERGARA.
MÉXICO, D.F. Al Partido de la Revolución Democrática se le acusa de violar los derechos de sus trabajadores: empleados y exempleados dicen a Proceso que en la Cámara de Diputados el PRD tiene personal únicamente con contratos sucesivos de tres meses, sin posibilidad de recontratación ni liquidación. Además, en la sede nacional –donde se le teme al fin de año pues corre el rumor de que habrá despidos masivos– dos agrupaciones sindicales se disputan la titularidad y se acusan mutuamente de ilegítimas.
La Unión de Trabajadores del PRD, creada en 1996, solicitó su registro ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA), pero el pasado 2 de septiembre se le negó la toma de nota.
El año pasado hizo su aparición el Sindicato Nacional de Trabajadores Mártires de Chicago (“los mártires”), el cual ha emplazado a huelga al partido dos veces: en octubre de 2012 y abril de 2013. Esto puso en alerta a la Unión de Trabajadores, encabezada por Tonatiuh Rodríguez Marrón.
En entrevistas con Proceso, los protagonistas de esta historia dan sus versiones.