MÉXICO, D.F. (apro).- Miembros de los Legionarios de Cristo –cuyo fundador, Marcial Marciel Degollado, vivió una doble vida como pedófilo, mujeriego y adicto a las drogas– reconocerán públicamente las responsabilidades por los abusos cometidos en el pasado, con un sentido penitencial de renovación.
Así lo aseguró el delegado pontificio para la reforma de ese instituto religioso, Velasio De Paolis, en una entrevista concedida a la Radio Vaticana, el mismo día que iniciaron en Roma los trabajos del Capítulo General Extraordinario, la asamblea que definirá el futuro de los Legionarios.
“Hemos distinguido el capítulo en tres grandes etapas. La primera etapa es una revisión del camino recorrido: un examen de conciencia –lo hemos llamado así– cumplido ante las acusaciones que han sido lanzadas, como nosotros las hemos verificado, y cuál debe ser el empeño que debemos asumir para superar estas dificultades”, dijo De Paolis al portavoz papal Federico Lombardi.