AUTOR: Juan Carlos Alarcón López.
La uniformada relató que el 22 de noviembre de 2012, el director del sector 52 de la Policía Auxiliar, Francisco Javier Guerra Ochoa, ordenó su arresto y la trasladó en una patrulla a la comandancia. El primer agravio sexual se originó cuando el mando policial le tocó los gluteos al bajar de la unidad.
Un año y dos meses después, Diana “N”, elemento de la Policía Auxiliar, se enteró que su denuncia por abuso sexual contra su exjefe de sector, fue enviada a la reserva sin que el Ministerio Público le notificara tal decisión, perdiendo así su derecho a inconformarse. Los agravios continuaron con amenazas y difamaciones a través de redes sociales.
La uniformada relató que el 22 de noviembre de 2012, el director del sector 52 de la Policía Auxiliar, Francisco Javier Guerra Ochoa, ordenó su arresto y la trasladó en una patrulla a la comandancia. El primer agravio sexual se originó cuando el mando policial le tocó los gluteos al bajar de la unidad.
Diana recriminó tal actitud y acto seguido Guerra Ochoa la llevó a su oficina donde se suscitó un segundo ataque sexual, aprovechando que se encontraban solos.