AUTOR: RODRIGO VILLEGAS.
La Sedena busca legalizar las armas que usan las autodefensas, los civiles armados aseguran que lo que quieren es desarmarlos y José Manuel Mireles dice que el registro de armas ante el Gobierno Federal es una burla.
La Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos señala que armas y fusiles como AK-47, R-15, M-16, Barret calibre 50 mm y armas cortas calibre 45 mm y 9 mm son del uso exclusivo del Ejército.
Y es justamente ese, el armamento con el que patrullan los diferentes grupos de autodefensa en Michoacán.
El pasado 27 de enero, el Gobierno Federal y los grupos de civiles armados firmaron el “acuerdo de institucionalidad”, el cual busca integrarlos a los Cuerpo de Defensa Rural de la Secretaría de la Defensa (Sedena).
Sin embargo, el reto está en que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto logré registrar a los más de 300 grupos que portan armas de usos exclusivo de las Fuerzas Armadas.