AUTOR: ICELA LAGUNAS.
El escándalo del priista Cuauhtémoc Gutiérrez pone contra la pared al tricolor, que en el DF había visto desde la barrera los problemas de los otros partidos
La controversia por sobrecosto y presuntos actos de corrupción de la Línea tienen contra la pared al PRD que analiza el costo político en las urnas; el PAN con los pleitos internos de sus corrientes está desdibujado en la ciudad. En ese escenario, el PRI creyó más que nunca tener posibilidades serias de recuperar el Distrito Federal.
Pero el escándalo alcanzó al tricolor e hizo que el marcador empatara para los tres principales partidos políticos que se encuentran enfrascados en el desprestigio, la corrupción los pleitos.
El que fuera hasta hace unos días el líder del PRI en el DF, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre fue acusado de manejar una red de prostitución a través de colaboradores que presuntamente contratan a mujeres jóvenes para que se desempeñen como sus acompañantes, contratadas vía nómina para ejecutar favores sexuales al dirigente.