AUTOR: PARIS MARTÍNES.
La titular de la Comisión de Derechos Humanos informó a la prensa local que, a su juicio, en 2013 sólo hubo un caso de "tratos crueles" y ninguno de tortura, en contraste con la documentación de 50 que dio a conocer Animal Político.
En Campeche, esposar a un ciudadano inocente y después patearlo entre varios policías, para obligarlo a realizar una confesión incriminatoria, no es tortura… o no lo es, según el entender de las autoridades estatales.
En esta entidad de la República Mexicana, tampoco es tortura cubrir el rostro con una bolsa plástica para asfixiar a un detenido; ni amordazarlo para luego golpearle el rostro con un directorio telefónico; ni tampoco lo es golpearlo entre varios agentes para después desnudarlo y dejarlo en cueros dentro de una celda, sin cobijo, alimento ni atención médica…
No. Según la Procuraduría General de Justicia del estado, según la Comisión de Derechos Humanos de Campeche, según la Secretaría de Seguridad Pública local e, incluso, según la Procuraduría General de la República, nada de eso es tortura.