AUTOR: PATRICIA DÁVILA.
La comunidad nahua de Aquila organizó una guardia comunitaria que fue duramente golpeada por el crimen… y por el gobierno. No quiso unirse a la Policía Rural decretada por la Federación y la respuesta sobrevino inclemente: 40 integrantes del grupo fueron detenidos y los restantes sufren persecución legal y mediática. En un entorno cada vez más descompuesto, otros tres comunitarios han desaparecido y cinco fueron asesinados.
AQUILA, MICH: Indígenas nahuas viven presos o a salto de mata en sus propias tierras. Cansados de pagar extorsiones por 700 mil pesos mensuales a Los Caballeros Templarios, hace un año –el 4 de junio de 2013– se organizaron en guardias comunitarias y sacaron de sus tierras a los delincuentes.
En enero pasado, el comisionado para la Seguridad y Desarrollo Integral en Michoacán, Alfredo Castillo Cervantes, ordenó que los desarmaran y detuvo a 45 personas, entre ellas a cinco templarios. Aprovechando el descontrol, supuestos autodefensas se establecieron en el pueblo y desde entonces son ellos quienes, apoyados por el comisionado y el alcalde Juan Hernández, presuntamente asesinan, desaparecen e intentan cobrar derecho de piso a los nahuas.