En los estados de Chihuahua, Veracruz y Tamaulipas hubo cambios de Gobierno y, en los dos últimos, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) fue derrotado por primera vez en las elecciones por las respectivas gubernaturas.
En Chihuahua y en Veracruz, además, se venció electoralmente al partido cuyos ex mandatarios, César Duarte Jáquez y Javier Duarte de Ochoa, respectivamente, terminaron con órdenes de aprehensión por probables hechos de corrupción como peculado, delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
En estas dos entidades, sin embargo, a las derrotas del PRI les siguieron aumentos en la cantidad de asesinatos dolosos que, en el caso de Veracruz, de acuerdo con datos oficiales, generaron los meses más violentos de los últimos 20 años: de 82 casos en junio, el mes de la elección que perdió el Tricolor, a 132 en julio y a 179 en agosto siguiente.