Los tres ex elementos de la Policía Estatal que fueron reaprehendidos por la Fiscalía gozaban de concesiones de taxi presuntamente otorgados por el ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez, por su silencio y complicidad.
Efraín Mártiz, padre de Gibrán Mártiz, una de las tres víctimas de los oficiales que ya están presos en Pacho Viejo, dijo que él investigó algunos datos sobre la ocupación de los gendarmes, y dio con la pista de que podían estar trabajando como ruleteros (taxistas).