No obstante, los maestros acordaron volver a las labores en este inicio del ciclo escolar 2017-2018, y no realizar una huelga magisterial.
El plazo de tres semanas que la CNTE dio a las autoridades es para que “tenga respuesta concreta a varios planteamientos”, entre los que se incluye la reinserción de los trabajadores con amenaza de cese por la evaluación y por participar en la huelga de 2016, así como el pago completo a los profesores con salarios retenidos como medida de presión para que se evalúen.