Además de vender gasolina robada en los establecimientos, propiedades de familiares del titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Luis Enrique Miranda, no se vendían litros completos, tenían problemas al despachar el combustible y deficiencias en el servicio.
De acuerdo con la investigación del periódico Reforma, los registros de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) señalan que desde 2014 las gasolineras en el estado de México de María del Carmen Miranda Nava y Ricardo Víctor Mercado Galán, hermana y cuñado del titular de Sedesol, presentaban irregularidades.