
Llama la atención que, para Peña Nieto, la población busca indicios de corrupción en todo lo que pasa. El presidente dijo que no era una cuestión genética de los mexicanos pero sí cultural. Como ejemplo, habló de un choque de vehículos como efecto de la corrupción: en redes sociales se dice que si el semáforo se descompuso es porque alguien pagó para que eso pasará. Así, de acuerdo con la óptica de Peña, lo que sucede es que el semáforo es corrupto.