En San Felipe del Ocote, del municipio guerrerense Apaxtla de Castrejón, los pobladores se levantaron en armas y defendieron su territorio contra la incursión de una célula de La Familia Michoacana que los atacó la mañana del viernes, obligándolos a abandonar sus hogares.
Un día antes, la misma célula llegó a la comisaría para exigir que le entregaran “al operador de una máquina que estaba rastrillando su carretera”, declaró uno de los desplazados en el albergue que instaló el Ayuntamiento de Apaxtla en el DIF municipal.