Los representantes gubernamentales pusieron sellos de clausura en el entorno de la instalación industrial, señalada por verter sus desechos en un arroyo aledaño, lo cual originaba un fuerte olor a hidrocarburo.
Tras unas 28 horas de permanecer cerrada por habitantes que exigían la clausura de una empresa acusada de contaminar un arroyo que despedía olores fétidos, fue abierta este mediodía la circulación en la carretera Villahermosa-Nacajuca.
El acuerdo para levantar la protesta se dio después de que funcionarios de la Secretaría de Bienestar clausuraran la compañía "Planta de Tratamiento de Aguas Congénitas", ubicada a la altura del fraccionamiento Tenerife, en la ranchería Saloya segunda sección, del municipio conurbado de Nacajuca.