Todos los días, militares, municipales, estatales, trabajadores federales, del Ayuntamiento o del Estado, les pasan por un lado sin verlos. Pero a los ciudadanos se les paran enfrente, los obligan a detenerse, a causar algún accidente o padecer la inseguridad. La Zona Norte de Tijuana, la entrada internacional y la escena de la construcción del Viaducto Elevado que promueve el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, es también una zona de zombis.
Cientos de hombres, mujeres, adolescentes, niños que en la indigencia y las adicciones, viven en los perímetros del canal de la Zona Río.