Además, explicó que en las sociedades democráticas debe haber espacio para las manifestaciones públicas ordenadas, pues la voz ciudadanas debe ser escuchada por las instancias correspondientes.
Desde la perspectiva del académico, el ejercicio de la ley no puede ser reclamado por nadie para sí mismo, por capricho, pues la sociedad actual exige el apego a la legalidad. Lo que implica no reprimir las manifestaciones.
Sobre la orden de aprehensión contra “Simitrio”, líder de vendedores ambulantes de la organización 28 de Octubre y su familia, el rector comentó que se debe apostar a la institucionalidad, al respeto al estado de derecho y los derechos humanos.
Baños Ardavín apuntó que si se comete algún exceso en la vida pública, los integrantes de la sociedad deben armonizarlos.
FUENTE: REVOLUCIÓN 3.0
AUTOR: REDACCIÓN.