El ex jefe de gobierno busca que todos los mexicanos elijan al presidente del partido; pretende ser una "verdadera oposición" a la Presidencia y dejar de ser "un satélite".
El aspirante a dirigir ese partido anunció durante el segundo Encuentro Nacional del Movimiento Progresista que mandará cartas a los congresistas para que también conviertan al partido en una “verdadera oposición al Presidente Enrique Peña Nieto” y no se mantenga como un instituto político “satélite”, que se conforma con “unos cuantos espacios” en las Cámaras de Diputados y Senadores.