Madrid. Repsol aprobó hoy en Madrid un blindaje frente a Petróleos Mexicanos (Pemex), propietaria del 9.3 por ciento de su capital y a la que la cúpula directiva atribuye pretensiones para dividir a la petrolera española en dos.
“Desde un punto de vista de negocio sería una barbaridad desgajar esta empresa en dos”, manifestó el presidente de Repsol, Antonio Brufau, en la junta de accionistas que la petrolera celebró en la capital española y que también dio la aprobación final al acuerdo con el gobierno argentino sobre la indemnización por YPF.
La junta aprobó modificar los estatutos de la empresa para fijar en el 75 por ciento el mínimo de los votos necesarios para todo cambio de relevancia en ella: transformación, escisión, fusión, cambio de domicilio social o cambio de negocios, según Brufau.
Pemex lleva tiempo criticando la gestión de Brufau al frente de Repsol, una gestión que el consejo de administración de la compañía respaldo en noviembre con el voto en contra de la mexicana.