AUTOR: JAIME APARICIO (Expresidente del Comité Jurídico Interamericano de la OEA)
MÉXICO, D.F: El caso Versini pudo ser una inmejorable oportunidad para el presidente Peña Nieto de revelar al país su voluntad de colocar el respeto al estado de derecho por encima de sus lazos personales y políticos con el exgobernador del Estado de México Arturo Montiel Rojas.
No ser cómplice de la estrategia de Montiel para quebrantar leyes o negociar su incumplimiento hubiese sido clara señal de que un nuevo PRI llegaba al poder a fortalecer los valores republicanos, a combatir la corrupción y a conducir al país a la modernidad.
Lamentablemente, las viejas prácticas políticas han prevalecido en perjuicio de la imagen e, incluso, de las perspectivas económicas de México, que se ven enrarecidas por la debilidad institucional.