AUTOR: J. JESÚS LEMUS.
Tras la desmantelación de La Gran Familia, el Gobierno Federal fija sus nuevos objetivos en Michoacán. Ayer, el líder de los transportistas en el estado fue detenido acusado de nexos con el narcotráfico y la congregación de la Nueva Jerusalén también estaría en la mira.
El Gobierno Federal continúa con su objetivo de recuperar el control del estado de Michoacán.
Fuentes al interior de la administración estatal del gobernador Salvador Jara aseguran que, tras la desmantelación de la casa hogar La Gran Familia, en los próximos días continuará la desarticulación de otros organismos, instituciones y núcleos sociales han estado operando con su propio autogobierno.
Entre estas se encuentra la comunidad religiosa de la Nueva Jerusalén, ubicada en el municipio de Turicato, en donde desde hace décadas existen denuncias de irregularidades que van desde maltrato infantil hasta violaciones, incluido el narcotráfico.