No fue en San Lázaro, sino en la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) que el ex jefe de Gobierno del Distrito Federal Marcelo Ebrard tuvo sus minutos de réplica.
Ebrard, señalado por la Cámara de Diputados por presunto desvío de recursos en la Línea 12 del Metro, acudió ayer a las instalaciones de la CNDH para solicitar que se garanticen sus derechos durante la investigación.
“Pido que se garanticen mis derechos de defensa adecuada, audiencia y debido proceso legal, y que se evite el uso de información de manera parcial para afectar mi derecho a la dignidad y la honra”, dijo Ebrard ante los medios.
El político agregó que el documento en el que se le señala “de manera difusa” como responsable de las fallas en la llamada línea dorada se envió a los medios de comunicación sin haber sido aprobado por la comisión especial que investiga el caso.
El exmandatario capitalino aseguró que se envió “con toda intención, sin haber sido aprobado, sin haber sido yo escuchado y sin haber elementos para fijarme responsabilidades, porque no estoy sujeto a ningún procedimiento”.
Contradice a Beltrones
“No estoy pidiendo impunidad, lo que estoy diciendo es que se ve una intencionalidad política muy clara hacia mi persona, atropellando los procedimientos de la Cámara de Diputados”, agregó el perredista, a quien le fue negada esta semana una audiencia en el Congreso.
Ebrard afirmó además que los responsables de esta campaña en su contra “están en Los Pinos y en la Secretaría de Gobernación, por más que Manlio Fabio (Beltrones), haya dicho que no intervinieron en el documento”.
Beltrones dijo previamente que aunque “confía” en que Marcelo no sea culpable del tema, “el problema existe y no puede decir que se lo crearon políticamente”.
FUENTE: REPORTE INDIGO.
AUTOR: STAFF