Este último libro, el cual es el tercero de una serie de obras que dan seguimiento al “modelo Enrique Peña Nieto”, aborda la debacle que ha sufrido el gobierno del priista extraído del Grupo Atlacomulco.
El texto enmarca el efímero mexican-moment-derivado de la aprobación de las reformas estructurales- y detalla cada uno de los acontecimientos que llevaron a que esta etapa se convirtiera, como lo definió el periodista, en el “mexican murder”.
En entrevista con Revolución TRESPUNTOCERO, el también autor del libro “Peña Nieto: el gran montaje”-obra en donde desmenuza la estrategia mediática utilizada para llevar al exgobernador mexiquense a la silla presidencial- afirma que el caso de Peña Nieto como una figura política mediática ha resultado grave, pues además de la ineficacia que ha demostrado para conducir a la nación, el grado de irritación social y el número de agravios a la población es alto.
El periodista e integrante del Consejo Editorial de Revolución TRESPUNTOCERO, señaló que parte de esta caída del gobierno peñanietista es el resultado de seguir con el modelo y sólo apostar a la cuestión mediática que maquille los hechos, pero que de fondo mantiene una ineptitud para manejar las riendas de la nación.
“La toma de posesión (de EPN) estaba hablando ya de las 2 caras de Peña. Por un lado la represiva en las afueras de Palacio con un despliegue policiaco inaudito, con detenciones arbitrarias y por el otro el gran set televisivo de Palacio Nacional, con sus invitados especiales, con una puesta en escena absolutamente faraónica. Era la restauración de un presidencialismo imperial pero que estaba y está absolutamente sostenido por alfileres mediáticos. En este ejemplo se ve la contradicción que no ha sido resuelta en dos años de gobierno, al contrario ha sido agravada, le siguen apostando a maquillar y a engañar a la población. Lo acabamos de ver con el asunto de los impuestos a alimentos procesados cuando el propio secretario de Hacienda dijo que no iba a haber nuevos impuestos. Entonces este tipo de actitudes son las que han agravado y han generado un encono social muy grave”, manifestó.
Villamil comentó que a la ineficacia del gobierno de EPN para manejar al país se debe agregar el intento de restauración autoritaria, mismo que ha fallado y que ha tenido consecuencias graves en la nación.
“Es un intento fallido con consecuencias graves: censuran a Carmen Aristegui, cierran espacios críticos en los medios electrónicos e impresos, ya están censurando canal 22, es decir es una caída muy dolora, no es una caída fácil, no es algo deseable, pero está ocurriendo, entonces el objetivo del libro, lo que pretende es darle instrumentos y herramientas de información y análisis a quienes están muy molestos y saben que esto no está funcionando”, dijo.
Jenaro habló sobre el caso Tlatlaya y Ayotzinapa, mismos que considera como el punto de quiebre del gobierno de EPN. No obstante, manifestó que si bien estos casos significaron poner el panorama la difícil situación, antes de ellos México ya cargaba con un historial de violaciones a derechos humanos.
“En la línea de tiempo del gobierno de Peña, en los dos primeros año estos casos son el punto de quiebre. Es decir Tlatlaya y Ayotzinapa se vuelven el contragolpe, la otra cara del rostro triunfalista del mexican moment. Pero en términos reales Ayotzinapa y Tlatlaya al final de cuentas son las muestras más dramáticas, pero no las únicas, de una constante situación de violencia social, de violación a DDHH, de ejecuciones extrajudiciales, de desapariciones forzadas; adquieren relevancia precisamente por el interés mediático (…) Hay una especie de paradoja trágica: en la medida en que el telepresidente le apuesta todo a lo mediático para sostenerse, en esa medida los escándalos y las situaciones trágicas adquieren una situación mediática muy grande, es decir está encerrado en su propia trampa”, indicó.
Asimismo hizo referencia al denominado y antes citado mexican moment, al cual calificó como una construcción mediática, que sólo buscó vender al país “como si estuviera en un momento de bonanza por las reformas estructurales, pero básicamente por la reforma energética que pretendía dejar satisfecho al gran capital internacional, pero que era humo, a tal grado que el propio medio que creó ese concepto-The Economist-ahora está diciendo y está descubriendo que hay corrupción, que hay monopolios y que hay una situación de rezago económico muy grande. Creo que hay un sector de la prensa extranjera que también se siente traicionado, se siente engañado, y eso le está costando muy caro a Peña, eso no paso en otros gobiernos, ni siquiera con Fox, ni con Calderón, sí hubo muchos agravios pero nunca se sobrevendió”, dijo.
Aunado a lo anterior detalló a lo que denominó mexican murder. Al respecto explicó que:” Cuando empiezan a surgir las narcofosas en la búsqueda por los 43, cuando de repente con toda la prensa encima comienzan hablar de 28 fosas en Guerrero, algo que los guerrerenses sabían, pero que el país y el mundo no, que estamos en un campo santo en muchos sentidos, que hay estados en los que hay una eliminación sistemática de la población que no se menciona y que no se investiga. Ese es el mexican murder, cuando la misma prensa dice: “qué está pasando en México”, ellos creían que como ya no se hablaba de la narco político y el crimen organizado ya no era un problema, pero claro que sigue, ese es el 3er ingrediente del problema”
En el libro, el periodista hace referencia sobre la admiración que EPN siente por el expresidente Profirió Díaz, misma que plasmó en su tesis de licenciatura. Villamil mencionó que para el priista mexiquense la forma en que Porfirio manejó las “formas duras” para gobernar es una cuestión de admirar.
“(EPN) Habla de la dictadura blanda. Él habla que admiraba el manejo de las formas duras de Porfirio Díaz o sea está admirando a un autoritario. La visión histórica de Peña es estática; si fue tan eficaz y tan querido y tan blando Porfirio Díaz, por qué terminó su gobierno en una revolución social y en el exilio. Si tanto admira a Napoleón, que esa es otra parte la admiración de Peña a Napoleón Bonaparte, que analice como acabó Napoleón, no sólo los momentos de grandeza cantada por la propaganda, sino como acabó, exiliado, en la isla de Santa Elena, repudiado, y eso que Napoleón si fue un gobernante con mucho poder y mucha legitimidad y mucho apoyo social. Todo autócrata termina mal, esa es quizá una de las lecciones de la historia, que tienen que entender los Peñistas”, manifestó.
“Televisa lo dejará solo cuando ya no le funcione”
Jenaro Villamil habló acerca del papel que el aliado principal de EPN, Televisa, juega en este contexto de crisis y debacle del gobierno del priista. Sentenció que la empresa propiedad de Emilio Azcárraga Jean podría abandonar al candidato que impulsó en el momento que considere ya no es benéfico para sus intereses.
“Son socios y cómplices de un proyecto de poder, pero no son lo mismo. No dudo que Televisa, conociendo como son y que ellos siempre velan por sus intereses, en el momento en que Peña ya no les funcione lo van a traicionar. Le van a jugar doble, lo cual indica que no es viable ni sano un maridaje de este tipo entre el político y el dueño de medios, pues siempre ocurren este tipo de efectos perversos y en el caso de México lo estamos viendo muy claramente. Ahorita ellos están apalancando a Peña porque les conviene y porque les está dando mucho dinero y beneficiando sus intereses, en la medida que ya no les sea eficaz lo van a botar, de eso no lo dudes ni tantito”, manifestó.
“El grupo Atlacomulco es el que gobierna”
En palabras de Jenaro Villamil, en México “es claro que el que gobierna es el grupo Atlacomulco, pues ellos son lo que invierten el dinero en Televisa y en todo el aparato mediático que respalda a Peña Nieto”.
En tal sentido, el periodista indicó que el grupo Atlacomulco se ha caracterizado por su historia de corrupción y en este momento de crisis tratan de salvar no sólo a su “elegido” sino sus intereses.
“El grupo Atlacomulco es una gran cleptocracia-el gobierno de los corruptos-esa es otra parte todavía más preocupante y que explica también la irritación social. No solamente es ineficaz, es altamente corrupto este gobierno y lo está demostrando todos los días, y a eso le agregas el cinismo. La historia del Grupo Atlacomulco es una historia de corrupción, entonces están tratando no sólo de salvar a la persona llamada EPN, sino están tratando de rescatar su salvo conducto para seguir haciéndose riquísimos con los contratos de obra pública y las privatizaciones del país”, indicó.
Añadió que además de la corrupción, la voracidad que ha demostrado el gobierno de EPN para emprender las reformas ha sido la causa de esta debacle de su administración.
“La realidad le está demostrando en todo momento a ese equipo de gobierno y a Peña que no se puede gobernar sólo con mentiras y con propaganda. A lo mejor puedes gobernar con propaganda pero siempre y cuando haya algo de realidad, de eficacia. Entonces, la realidad que les está tallando en la cara todos los días es una en donde hay sectores sociales en México que no van aceptar un gobierno corrupto y que no van aceptar un presidente ineficaz que nos lleve al despeñadero, dice un clásico”, manifestó.
Villamil detalló que en lo que va de la actual administración, EPN ha dado muestra de su poca aceptación de la crítica. Manifestó que se ha empeñado en mantener sus dichos a pesar que la realidad sea otra.
“En poco más de 2 años ha demostrado que él no es permeable a la crítica, que cada vez que le hacen una crítica él insiste en lo contrario. En eso hay una diferencia con Salinas. Salinas era un hombre igual de autocrático, de autoritario pero astuto, eficaz en su modelo aunque el país se le derrumbo al 6to año; a este se le está derrumbando al segundo año. Salinas todavía hacia una demostración del mando, Peña hace una demostración no del mando, sino de esquizofrenia, que vive en otro mundo, mientras les dicen una cosa, él está planteando otra, no asume nunca una crítica.
Por otro lado el periodista habló sobre una posible salida de EPN de la presidencia. Villamil indicó que esta idea incluso está concebida por priistas, los cuales platean la posibilidad que EPN sea el primer presidente del partido que no termine su mandato.
“Sí veo una posible salida de EPN, y eso no lo digo yo, me lo han dicho algunos priistas, lo han planteado que Peña puede ser el primer presidente priista que no termine su gobierno, eso lo han planteado, en secreto, en privado, o sea está en el escenario de los priistas, no lo manejan de manea pública, pero esta. Ellos lo plantean como una posibilidad real, eso hablan que hay quienes dentro del sistema también ven este desastre.
“En un escenario positivo lo ideal sería que enmendaran, recapacitaran, dejaran un modelo de telepresidencia y entraran a un modelo de presidencia y jefatura de Estado real. La posibilidad de que esto ocurra es menor al 5%. El escenario tendencial es que las tensiones y la irritación crezcan y el intento autoritario se fortalezca de manera bárbara. Y esto está sucediendo, es decir el escenario que estamos viviendo, no veo ningún cambio, esto puede llevar a acelerar aún más la caída y el escenario catastrófico el cual es que se derrumbe el sistema, que el Peñismo sea la última muestra del modelo neoliberal”, manifestó.
FUENTE: REVOLUCIÓN 3.0
AUTOR: EDAGAR ROSAS.