Las fechas sobre la posible extradición abren sospechas. El mismo día que el Procurador Jesús Murillo Karam se negaba a la extradición, “El Chapo” se amparaba. Todo sucedió entre el 26 y 27 de enero pasado.
En esos mismos días, en esas mismas horas, Estados Unidos hizo la petición formal de extradición, de acuerdo con Dolia Estevez, periodista de Forbes.
Pero “El Chapo” ya se había amparado y el Procurador expresó que lo enviaría al extranjero.
El 27 de enero de 2015, en entrevista con The Associated Press, Murillo Karam dijo que no tenía intención de extraditar a Estados Unidos al líder del Cártel de Sinaloa (capturado casi un año antes: el 22 de febrero de 2014). Aceptó que en esos días le llegaría una petición formal de extradición por parte de Washington.
Se negó a extraditarlo porque, dijo, no había peligro de fuga.
“Yo puedo aceptar la extradición, pero en el momento que yo diga. ‘El Chapo’ se tiene que quedar aquí a cumplir su condena y después lo extradito. Unos 300, 400 años después. Falta mucho”, expresó.Murillo Karam citó una “cuestión de soberanía” en esa misma entrevista y dijo que el procedimiento de extradición era apropiado “cuando existen cuestiones de seguridad que lo ameritan o por peligro de fuga”, algo que, aseveró en ese momento, “no existe”.
Murillo Karam citó una “cuestión de soberanía” en esa misma entrevista y dijo que el procedimiento de extradición era apropiado “cuando existen cuestiones de seguridad que lo ameritan o por peligro de fuga”, algo que, aseveró en ese momento, “no existe”.
La entrevista se publicó el martes 27 de enero.
El lunes inmediato anterior, al mismo tiempo que se desarrollaba el encuentro de Murillo Karam con la prensa extranjera, los abogados ya tramitaban amparos.
Ese lunes, el juez décimo en materia penal del Distrito Federal admitió el juicio promovido por la defensa del narcotraficante para que la situación jurídica de Guzmán no fuera alterada. Y el martes, cuando se publicó la entrevista, sus abogados presentaron un recurso similar ante el juez decimosexto de distrito en materia administrativa y se concedió la suspensión.
Además, justo cuando el Procurador reveló que estaba por recibir la petición de extradición de Estados Unidos, el juez pidió a la PGR y a Relaciones Exteriores, dependencias mexicanas encargadas de la posible extradición del capo, que informaran en un plazo no mayor a 15 días de “si se ha iniciado algún trámite que tenga como finalidad trasladar al prisionero del penal del Altiplano a otro centro penitenciario”.
Pocos meses después, “El Chapo” se fugó.
El 23 de febrero, casi un mes después de la negativa de Murillo Karam a la extradición, las agencias AFP y AP dieron a conocer que Estados Unidos insistía en juzgar a “El Chapo” en su territorio. Cortes en por lo menos siete tribunales federales de Distrito, entre ellos los de Chicago, San Diego, Nueva York y Texas, emitieron encausamientos contra Guzmán Loera por cargos que iban desde el contrabando de cocaína hasta la participación en organizaciones criminales dedicadas al asesinato y otros delitos graves.
“Funcionarios federales en Chicago estuvieron entre los primeros en decir que querían enjuiciar a Guzmán en su jurisdicción. El domingo, el fiscal federal adjunto Steven Tiscione, en Brooklyn, Nueva York, se convirtió en el segundo”, dijo AFP.
“Sí, solicitaremos su extradición”, dijo Steven Tiscione en un correo electrónico enviado ese febrero.
Además un líder clave de la Cámara de Representantes exhortó a las autoridades mexicanas a extraditar a Guzmán Loera. El republicano (por Austin) Michael McCaul, presidente de la Comisión de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, dijo que Guzmán era el capo más notorio a nivel mundial.
“Creo que la secuencia normal es que México, siendo una nación soberana, realice el primer proceso”, dijo el congresista al programa “This Week” de ABC.
“Sin embargo, él ya escapó de prisión en 2001, y hay corrupción en ese país”, agregó. “Pido a los mexicanos que consideren la posibilidad de extraditarlo a Estados Unidos, donde se lo conducirá a una prisión de súper máxima seguridad de la que no podrá escapar y será llevado ante la justicia con una sentencia de encarcelamiento de por vida”.
“Tenemos la intención de pedir su extradición”, dijo a la agencia AFP Robert Nardoza, un portavoz de la oficina del fiscal del Distrito del Este de Nueva York. “No se sabe cómo se va a proceder en este momento”.
El domingo pasado, a horas de que se diera a conocer la noticia de la fuga, Peter Bensinger, ex agente de la DEA, dijo a Associated Press que Guzmán Loera “debió haber sido alojado en una prisión estadounidense”. David Shirk, experto del Centro Internacional Woodrow Wilson, dijo al mismo medio que tras la fuga, “las peticiones de extradición [de los EU] serán más intensas”.
“Va a ser más difícil para el gobierno mexicano decir: ‘No, no. Tenemos esta bajo control [...]’ Está claro que las prisiones de máxima seguridad en México son todo lo contrario”, comentó Shirk a AP.
¿POR QUÉ NO HICIMOS LO SUFICIENTE?
Ahora, tras la segunda fuga, Greg Abbott, Gobernador republicano de Texas, criticó la administración de Barack Obama por no hacer lo suficiente para asegurar la extradición de “El Chapo” Guzmán. “Estamos profundamente preocupados. Los cárteles en México, que operan en cierta medida en los Estados Unidos, son algo que supone un gran peligro. Estamos muy frustrados porque esperábamos que sea extraditado a Estados Unidos para ser encarcelado aquí”.
“¿La Casa Blanca de Obama ha hecho lo suficiente para presionar al gobierno mexicano?, le preguntó en Fox News Channel. Respondió: “Creo que el gobierno de Obama no ha hecho lo suficiente”.
“No tendríamos siquiera que estar hablando de ciudades santuario [para el crimen organizado en Estados Unidos] si tuviéramos un gobierno federal que hace su trabajo para asegurar la frontera y proteger nuestra soberanía. Hay ciudades santuario porque el gobierno federal ha abandonado su responsabilidad. Tenemos que elegir a un Presidente que va a hacer un buen trabajo de asegurar la frontera, pasando por las reformas de inmigración”. Abbott juró como Gobernador de Texas el 20 de enero 2015.
Estados Unidos ofreció ayudar a México para recapturar al narcotraficante, quien escapó de la noche del sábado. La Fiscal General, Loretta Lynch, dijo que el gobierno “está dispuesto a trabajar con nuestros socios mexicanos para ofrecer cualquier tipo de asistencia que pueden ayudar a su pronta recuperación”.
“Además de sus crímenes en México –agregó–, enfrenta cargos por tráfico de drogas y crimen organizado en los Estados Unidos”. Guzmán tiene acusaciones en al menos siete tribunales federales.
La fuga de Guzman Loera ha colocado en un primer plano la pregunta, que han hecho políticos, especialista en temas de seguridad y periodistas, de por qué no fue extraditado cuando las autoridades de ese país lo solicitaron tras su captura realizada por la Marina.
El Senador republicano y precandidato presidencial estadounidense Marco Rubio exigió este martes que Guzmán Loera sea juzgado en EU una vez sea apresado y dijo que su fuga es un “duro golpe” para los que trabajan de “buena fe” con México.
“Cuando Guzmán sea detenido de nuevo, los EU deben perseguir su extradición de acuerdo con el tratado que tenemos con México”, pidió Rubio, presidente del Subcomité de Relaciones Exteriores para el Hemisferio Occidental del Senado estadounidense, encargado de los asuntos relacionados con América Latina.
“Tenemos la capacidad de llevarlo ante la Justicia”, advirtió Rubio, que aprovechó para criticar que el Presidente de EU, Barack Obama, no lograra la extradición del delincuente cuando fue capturado en febrero de 2014, trece años después de su primera fuga de una cárcel de máxima seguridad.
Estados Unidos, que colabora mano a mano con México para cazar a “El Chapo”, reiteró el lunes su interés en juzgar en un futuro y ante sus autoridades judiciales al peligroso narcotraficante, considerado antes de su captura por la Comisión sobre Crimen de Chicago como el “enemigo público número uno” de la ciudad
InSight Crime, una organización dedicada al estudio del crimen organizado en Latinoamérica y el Caribe, dijo en una análisis publicado este día que el escape de Guzmán Loera del Centro Federal de Readaptación Social Número 1, El Altiplano, “ha puesto de relieve la política inconsistente de México sobre la extradición de sospechosos de tráfico de drogas buscados en Estados Unidos”.
“La fuga de Guzmán de una prisión de máxima seguridad fue precedida por riñas entre funcionarios de Estados Unidos y México sobre su extradición que comenzaron casi inmediatamente después de su captura en febrero de 2014. Poco después de la detención de ‘El Chapo’, los fiscales estadounidenses dijeron que estaban buscando su extradición, aunque no está claro si hicieron una petición oficial”, dijo la organización.
InSight Crime refirió que es precisamente por esta negativa del gobierno de México para extraditar al capo sinaloense, que su fuga provocó la ira de la autoridades de Estados Unidos, “que ayudaron en una persecución multimillonaria y de varios años”
La organización recordó que la extradición es parte de los tratados bilaterales, por lo que la fuga de Guzmán Loera “ha puesto de relieve la incapacidad de México para establecer un enfoque coherente en el tratado que mantiene con los EU especialmente en lo que se refiere a la extradición de los narcotraficantes que son buscados en los Estados Unidos”.
“De hecho, ‘El Chapo’ es sólo uno de los notorios traficantes de droga que aún tienen que ser enviados a Estados Unidos para enfrentar cargos relacionados con el tráfico de drogas. Mientras tanto, una serie de otros violadores de las leyes de Estados Unidos y México, han sido extraditadon a los EU. La lógica del gobierno de México sobre estas cuestiones es difícil de entender. Por ejemplo, los funcionarios mexicanos extraditaron al hermano y al hijo del líder del Cártel de Sinaloa Ismael Zambada García, sin embargo, afirmaron que la extradición de su colega, Guzmán, habría violado la soberanía nacional de México”, dice el análisis de Insight Crime.La BBC de Londres se pronuncia en el mismo sentido y reseña en un artículo de la periodista Vanessa Buschschluter que el escape Joaquín Guzmán “ha vuelto a encender el debate sobre si debería haber sido extraditado a Estados Unidos”.
“Mientras que los tribunales estadounidenses discutían sobre quién tenía el mejor caso contra Guzmán y por lo tanto debía recibir la prioridad llevarlo ante la justicia, los funcionarios mexicanos estaban dejando en claro que no tenían ninguna prisa para mandarlo al otro lado de la frontera”, publica la cadena británica.
El medio recuerda que como jefe del cártel de Sinaloa, a “El Chapo” se le acusa de supervisar el contrabando de grandes cantidades de droga desde Sudamérica y Centroamérica a los Estados Unidos. También se enfrenta a cargos de lavado de dinero, crimen organizado y el tráfico de armas en los tribunales tan distantes como Arizona y Texas.
De acuerdo con CNN, el temor de un escape era una de las razones por las que los funcionarios estadounidenses habían presionado el gobierno mexicano a extraditarlo a ese país para enfrentar cargos ante las múltiples acusaciones por su papel en los esquemas de tráfico de droga.
“Esto es exactamente por qué pedimos su extradición”, dijo un agente de Estados Unidos a la cadena norteramericana, y agregó que el escape demuestra “la fuerza del cártel y su capacidad de pago a la gente. Si este tipo puede salir de la cárcel se muestra la profundidad de la corrupción que está ahí “.
Para Filemón Vela, representante demócrata por Brownsville, Texas, el gobierno de EU tiene que “ejercer un músculo diplomático más fuerte” para garantizar la recaptura de Guzmán y su extradición a los EU. “La extradición es un arma importante en el esfuerzo de Estados Unidos y México contra los cárteles de la droga”, dijo en declaraciones a la prensa.
“Nuestra incapacidad para México de extraditar Chapo Guzmán, y para acusar a los gobernadores de Tamaulipas Tomás Yarrington y Eugenio Hernández Flores es un insulto a la instituciones encargadas de aplicar la Ley y al personal de la fiscalía que han trabajado durante años para construir casos penales contra estos especuladores de la droga”, dijo Vela.
Para Bloomberg, un medio especializado en finanzas y negocios, la pregunta es si “El Chapo” debió ser extraditado en su momento a Estados Unidos.
Al respecto, el periodista Victor Michel dijo esta mañana en el programa “Market Makers” que una de las versiones más mencionadas en México es que esto no ocurrió “por que el gobierno mexicano no quizo que fuera extraditado a los Estados Unidos por que él [Guzmán Loera] podía dar una gran cantidad de información embarazosa a los agentes americanos sobre autoridades del gobierno mexicano”.
FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: http://www.sinembargo.mx/14-07-2015/1414120