Los vecinos de la casa en construcción de la colonia San Juana, a unos metros de Almoloya, aseguran que nada sospechoso se vio durante el último año. Nadie sabe ni dice nada.
El túnel por el que, de acuerdo a la versión oficial, se fugó del penal del Altiplano el narcotraficante Joaquín Guzmán sería un portento de obra de la ingeniería civil, ya que debío haber sido construido en un breve lapso de tiempo y de manera casi invisible para los escasos pobladores de la colonia San Juanita Centro, del municipio de Almoloya, en el Estado de México.
Y es que ninguno de los pobladores de las cinco viviendas que se encuentran inmediatas a la construcción donde inicial el túnel notaron nada extraño en los últimos 12 meses. La edificación de la casa la realizó una brigada de 5 o 6 albañiles, que eran supervisados una vez a la semana, principalmente los sábados o domingos, por quienes parecían ser los dueños.
A decir de algunos especialistas en construcción consultados por Reporte Índigo, la construcción del túnel –que inicia a una distancia de casi 3 kilómetros de penal federal de Almoloya–, tuvo que haber sido realizada por una cuadrilla de entre 10 a 12 hombres, laborando en jornadas de por lo menos 10 horas diarias, durante al menos un año.
Además, el cálculo para asegurar que el túnel empatara con la accidentada geografía que se observa en la parte sur del penal federal y que de llegara de manera milimétrica al ducto para horadar la celda que en ese momento ocupaba el Chapo Guzmán debió ser extremadamente exacto.
La ubicación de los reos al interior de las cárceles federales se da solo por disposición del Consejo Técnico Interdisciplinario. Ningún reo decide cuál será su estancia, por lo que resultaría imposible que “El Chapo” supiera cuál sería su ubicación dentro del penal para cuando el túnel estuviera concluido.
Ninguno de los escasos vecinos de la casa en donde inicia el túnel sospechó nada. Aseguran que nunca se escuchó ningún ruido y que lo único que a veces parecía sospechoso era el trabajo de una maquina retroexcavadora que parecía hacer maniobras de compactación sobre el patio de la casa que hoy esta abandonada.
El sitio en donde inicia el túnel, que de acuerdo a la teoría de la PGR pudiera no haber sido construido por “El Chapo”, se encuentra bajo resguardo de las Fuerzas Federales. Pero por versiones de quienes están cerca de la escena se sabe que al interior hay ropa, calzado, herramientas de construcción y enceres personales de quienes participaron en el trabajo de excavación y cimentación del túnel.
Esta obra de ingeniería tiene otra característica: se edificó a menos de 2 kilómetros de distancia cuartel del Octavo Regimiento de Infantería, así como a casi otros 2 kilómetros de distancia del colegio de Formación Policial de Almoloya, donde tampoco se supo con anticipación de las intenciones de “El Chapo”.
‘Chapo’ con vocación de topo
De acuerdo al experimentado periodista especializado en seguridad nacional y crimen organizado, José Reveles, “El Chapo” sí pudo haberse fugado por el túnel. La vocación de Joaquín Guzmán es la de un topo que le gusta hacer túneles, es un experto en ese sentido, aseguró Reveles.
El periodista recordó como antecedente inmediato el hecho de que solo en la frontera norte de México -donde se han encontrado al menos 120 túneles para posibilitar el trasiego de armas y drogas desde y hacia lo Estados Unidos- la mayoría de esos fueron ideados por Guzmán.
Son túneles, explicó Reveles, que tienen su sello personal: ventilación e iluminación. Con un derroche de tecnología y dinero. Son túneles como el que se encontró en Almoloya, que comunican a sitos estratégicos, en este caso desde una casa con el interior de la cárcel federal en la que estaba recluido.
Pero más allá de que si “El Chapo” salió por la puerta principal de la cárcel que lo quería contener, el convencimiento para el periodista va en el sentido de que fue finalmente la corrupción la que excarceló al que se le considera como el narcotraficante más importante de las últimas décadas en el país.
La estimación de Reveles apunta a la posibilidad de que “El Chapo”, una vez que salió de prisión, regresó a la zona de Sinaloa “en donde tiene su zona de confort”. Piensa que Joaquín Guzmán volverá a la sierra de su estado natal, porque allí tiene a su ejército particular que lo puede cuidar, el grupo llamado Los Ántrax.
Nadie vio nada
En Almoloya la gente tiene miedo de hablar. Pocos son los que hablan con la nube de periodistas que han tomado por asalto el poblado sede de la cárcel federal del Altiplano. La mayoría de los abordados dicen que nadie se imaginaba eso; a nadie le cabe en la cabeza que “El Chapo” haya ideado la forma de dejar la cárcel.
A los pobladores cercanos a la casa del túnel les llamó la atención el sobrevuelo nocturno del helicóptero que comenzó a buscar a Guzmán en la oscuridad de la noche. La búsqueda del reo comenzó al filo de las 23:00 horas, justo dos horas después de que se supiera de su ausencia, una vez que se pasó la última lista del sábado.
Pero más extraño es el hecho de que las investigaciones de la PGR no se hayan extendido a los vecinos de la casa del túnel, a quienes no se les ha cuestionado de manera oficial sobre los datos que pudieran aportar para la integración de las líneas más acertadas.
La pasividad de la PGR entorno a las líneas de investigación sobre el caso de la fuga de “El Chapo” no solo se evidencia en la poca importancia que en esa dependencia se les ha dado a los vecinos testigos de la casa del túnel. También se ha observado desinterés por la preservación de la escena del crimen, toda vez que la casa en cuestión no ha sido revisada por los agentes del Ministerio Público del fuero Federal.
FUENTE: REPORTE INDIGO.
AUTOR: J. JESÚS LEMUS.