El portal oficial de ese instituto político detalla que el “zar” anticorrupción es parte de la base partidista del Quinto Distrito Electoral y no precisa la fecha de afiliación.
El propio Espinoza Valdez reconoció su militancia luego de que Francisco Arenas, columnista del sitio web “Termómetro en línea”, relató que Espinoza Valdez se integró al PRI a principios de la década pasada cuando colaboró como asistente de la actual gobernadora Claudia Pavlovich, cuando ella ocupó la regiduría de Hermosillo de 2000 a 2003.
“Odracir Espinoza empezó a entender y saber de política de quien fuera su mentora en esas tareas: Claudia Pavlovich”, apuntó el columnista.
Y cuestionó: “Para responder a la expectativa generada se suponía que el fiscal anticorrupción tendría una personalidad relacionada con la sociedad civil, sin ninguna identidad partidista para que de esta manera se garantice su labor alejada de afectos e intereses”.
El recién nombrado fiscal reaccionó a la publicación y la noche del martes publicó tres mensajes en su cuenta de Twitter para defenderse:
Escribió: “Amigos en efecto me afilié hace algunos años en mi paso por la Universidad. Pero nunca ocupé cargos partidistas o de elección popular…”
En otro mensaje, aseguró que este tema ni cualquier otro afectarán la objetividad de la fiscalía debido a que es una institución de “funcionarios expertos y serios”, cuya labor es garantía de objetividad.
“No es un solo hombre, es una institución con marcos normativos y solidez técnica”, subrayó en otro tuit.
El lunes pasado, al tomar posesión de su nuevo encargo, Espinoza Valdez afirmó:
“Se ha acabado el tiempo de los intocables, de la justicia selectiva que es implacable en todo momento con los que menos tienen, pero es ciega, sorda y muda con quienes abusan del poder público para servicio personal.
“Se acabaron esos tiempos en los que la corrupción servía de mercadeo político, donde todo se podía negociar sin el menor pudor, la corrupción mata, todos lo sabemos y se ha comprobado”, dijo.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: MILTON MARTÍNEZ.